Uno de los favoritos de los norqainers vuelve en un tamaño más cómodo, más robusto y con detalles de color que invitan a vivir el “My life my way” sin restricciones.
La independencia en su sentido más fundamental radica en tener la capacidad de actuar sin depender de las opiniones, intereses y acciones de los demás. Para ser independiente hay que ser autónomo, capaz de tomar decisiones importantes sin injerencias externas, pensar críticamente y formar un criterio autónomo para vivir la vida de acuerdo con nuestras convicciones.
El párrafo anterior bien podría definir uno de los principios fundamentales de Norqain, una de las firmas suizas más jóvenes y de propiedad familiar que tiene como principal objetivo crear relojes de indiscutible calidad, innovadores y centrados en un estilo de vida eminentemente aventurero. Todo sin dejar de lado la herencia relojera de sus fundadores, Ben Küffer, Ted Schneider y Mark Streit, plena de experiencia y savoir-faire.
Su independencia, lejos de aislarlos, ha llamado la tención de otras mentes visionarias, que comparten sus principios y con las que han hecho alianzas que los han llevado a crecer hasta situarse como favoritos entre los entusiastas del lujo, la calidad y la vida al aire libre.

Libre e independiente
Quizá por eso no es de extrañar que una de sus colecciones más exitosas lleve precisamente ese nombre: Independence. Entre sus modelos más destacados se ubican el Wild One, creado en colaboración con el legendario Jean-Claude Bivier, o el primer reloj esqueletizado de la firma, el Skeleton Flyback Chrono, presentado en 2021. La aceptación de este último, que exhibe con orgullo su mecanismo a través de una carátula transparente, los llevó a crear distintos modelos esqueletizados en distintos colores, dimensiones y materiales, sin perder un ápice de su carácter deportivo, todos ellos son aptos para la aventura, siempre en línea con el espíritu libre de Norqain.
El ultimo lanzamiento de la firma basada en Nidau, Suiza, consiste en dos modelos del Independence Skeleton, que conservan intactas las características ganadoras de este modelo, pero en un tamaño ligeramente más pequeño y en dos versiones: acero inoxidable y acero con revestimiento DLC negro. Con tan solo 40 mm de diámetro, pero un poco más robustas, estas nuevas versiones son aún más cómodas de llevar y reafirman la maestría creativa de Norqain.

Precisión aventurera
Dentro de la compacta pero robusta caja de acero se ubica el Calibre NB08S, un movimiento automático que cuenta con certificado COSC (Contrôle Officiel Suisse des Chronomètres) que valida su precisión y calidad. Este mecanismo garantiza una reserva de marcha de hasta 41 horas y es completamente hermético hasta 100 metros. El terminado de la caja que lo resguarda muestra una combinación de superficies pulidas, cepilladas y arenadas que los hacen sofisticados y atrevidos.
La distinción entre las dos versiones no se limita al color de la caja, se extiende hasta la correa e incluso a pequeños detalles en la carátula que no pasan desapercibidos. La versión de acero inoxidable se puede llevar con una correa de caucho color carbón o un brazalete de acero. En su carátula resalta el segundero de punta color turquesa.
La caja recubierta con DLC negro se afirma con una correa caqui o bien de caucho negro, ambas están fabricadas con textura estilo milanés que las hace más cómodas y refinadas. En este caso, la punta del segundero se presenta en otro de los colores del verano: el naranja. Ambos tonos cumplen con lo que prometen: resaltan la individualidad y el carácter indomable de quien los lleva.
